mi historia

Hola, soy Fabi

A veces cuesta empezar. Presentarse a uno mismo es ¿difícil?… Creo que la mejor manera de hacerlo, ya que nuestras experiencias determinan en gran medida la persona que somos en la actualidad, es contarte mi historia.

De toda la vida me ha gustado mucho comer y he sido siempre «mala» para los deportes, por ese motivo tenía cierto sobrepeso en mi infancia. Me implantaron la cabeza de que el deporte no era lo mío, que total no me preocupara si no me iba a ganar la vida con el deporte (si vieran a lo que me dedico ahora jajajajaja en fin la de vueltas que da la vida).

Después de haber pasado por una mala relación con la comida y una amenorrea (falta de menstruación) entendí la importancia de la nutrición y que era más que «engordar y adelgazar» y me matriculé en nutrición humana y dietética.

Comprendí y sentí la necesidad de empezar a hacer deporte: en segundo de carrera empecé a ir al gimnasio y en cuarto me apunté por primera vez a un box. Los hierros sin duda habían conquistado mi corazón ya que entendí que no era mala para el deporte, sino que no había encontrado «mi deporte» ahora sé que estoy donde debo estar.

Los hierros conquistaron mi corazón nivel dejé de verle el sentido a dedicarme solo a la nutrición, entendí que no tiene sentido comer perfecto si no ejercitas correctamente tu cuerpo y quise dedicarme profesionalmente también al entrenamiento, así que estudié el técnico superior en acondicionamiento físico.

Pero la historia no acaba aquí. Durante este par de años en la carrera seguí, sin querer, restringiendo alimentos. Porque aprendí a «comer intuitivo» desde la desinformación y la carbofobia. Y no entendía por qué no rendía en mis entrenamientos de CrossFit ni mejoraba mi composición corporal. NO SÉ RICK. 

De hecho, llegué a dejar el crosstraining por esta frustración por no mejorar y cansancio extremo, pese a ser mi deporte preferido.

Hasta que decidí investigar de manera más profunda, formarme en nutrición deportiva (rendimiento y composición corporal) y aplicar en mi misma (con ayuda de otro nutri porque estaba muerta de miedo) todo lo que había aprendido y ahora me encuentro mejor que nunca, entrenando más fuerte que nunca, comiendo más que en mi vida y con vitalidad y energía para hacer en el día todo lo que se me ponga por delante. En fin, un gusto vivir así.

Y me da muchísima rabia ver a atletas auto – mermando su rendimiento, comiendo como ardillas para perder grasa cuando NO ES NECESARIO y sintiendo que no rinden en sus entrenamientos, en su vida, que no pueden compaginar la dieta con sus planes… sintiéndose que viven la vida a medias por buscar perder grasa y/o entrar en un canon totalmente irreal.

Es hora de romper con esto, es hora de romper con las dietas restrictivas para perder grasa, la obsesión y cuidarnos de verdad, comer suficiente y darle a nuestro cuerpo todos los nutrientes necesarios para vernos bien y sentirnos bien, tanto dentro como fuera del box. 

Rompe con los ciclos de las dietas restrictivas y siéntete tan bien como yo y los +250 atletas a los que ya he ayudado